
En el programa “Santo Remedio”, José Enrique Silva, Presidente de la Asociación de Industrias Farmacéuticas Nacionales, habla sobre esta problemática de salud pública que atenta directamente contra los pacientes de los seguros sociales.
En los últimos días, diversos medios de comunicación dieron cuenta sobre las grandes cantidades de dinero que el Estado peruano invierte en medicamentos inservibles de proveedores extranjeros. Muchos de estos medicamentos han sido distribuidos en pacientes de seguros sociales, pese a su ineficacia comprobada, con resultados aún desconocidos. Otros fueron destruidos por su falta de calidad.
Estas compras no son ilegales ni fraudulentas, debido a que se encuentran debidamente sustentadas a través del Decreto Legislativo N° 14444, que modifica la Ley N° 30225, ley de contrataciones del Estado. Sin embargo, sí son cuestionables, debido a que la inversión no beneficia a ningún asegurado.
En ese sentido, en el programa “Santo Remedio” de Enconsulta.pe, José Enrique Silva, presidente de la Asociación de Industrias Farmacéuticas Nacionales, habló sobre esta problemática de salud pública.
“Nosotros hace casi tres años estamos advirtiendo que esto es un peligro. Lo que ha sucedido en este conjunto de productos con problemas, sencillamente es que ha empezado a reventar. Los problemas van a abundar y el Congreso recién reacciona por los cerca de tres millones de soles que se han perdido con los medicamentos destruidos. El problema no son los tres millones. El problema es la cantidad de gente que se va a demorar en tener sus tratamientos, es la cantidad de desperdicio en logística, en papeles y en procedimientos, cuando debieron hacerlo de una manera igualitaria”, mencionó el especialista.
Asimismo, Silva explica los motivos por el cual aún se busca importar este tipo de medicamentos (inservibles), pese a que en el mercado nacional se pueden encontrar alternativas que realmente ayuden a los pacientes.
“No existe una política industrial farmacéutica. La industria farmacéutica en este momento comparado con los índices de crecimiento del PBI nacional e industria farmacéutica nacional, han evolucionado la mitad de lo que ha evolucionado el PBI nacional, pero el tema no es quejarse, sino entender que es lo que lo ocasionó y qué es lo que debemos hacer. Qué ocasionó, pues un acoso regulatorio a la industria nacional todo el tiempo”, precisó.
“Nosotros estamos defendiendo nuestros espacios del abuso, porque hay temas de abuso. Me hacen comparar con productos que ya no están en el mercado o que no han sido exitosos en el mercado, pero no solamente eso afecta a la industria nacional. Estas actitudes como el Decreto Legislativo N°14444 es una falta de respeto al proveedor formal. Nosotros decimos sí, a la competencia, por supuesto, pero todos cumplan los mismos requisitos”, concluyó.